La Fórmula Mágica para Tenerlo Todo. Parte 2

Hace algunos días escribí un blog acerca de la fórmula mágica para tenerlo todo, donde hablamos acerca de la congruencia energética y la importancia de que tus pedidos al universo estén alineados con tu energía.

En ese blog hablamos acerca de qué ocurre cuando pedimos por una energía en nuestro mundo pero nuestra vibración no va con ella. Como por ejemplo cuando pedimos por más dinero, pero todo el tiempo estamos vibrando en carencia o en miedo de no tener o estamos guardando el dinero para que no se nos acabe.

Además de lo que hablamos en ese blog, hay algo que también hace parte de la congruencia energética y que tiene vital importancia a la hora de que llegue a tu vida aquello por lo que has estado pidiendo y está relacionado con el entusiasmo o la expansión que estos pedidos generan para ti. 

¿Cuánto de aquello por lo que estás pidiendo es algo que a ti realmente te entusiasma o te emociona?

¿Cuánto de lo que pides es algo así como woawwwwwwww?

¿Pides desde tu mente, desde la limitación o pides desde la energía de la posibilidad?

Y quizás te estarás preguntando: ¿Qué tiene esto que ver con la congruencia energética o con la fórmula mágica para tenerlo todo?, y es algo que voy a explicarte a continuación:

A veces nuestros pedidos se basan más en satisfacer las necesidades de otras personas que en algo que realmente a nosotros nos entusiasma o que tiene la energía de la vida que queremos vivir. Voy a ponerte un ejemplo para mayor claridad. Por ejemplo, si tu familia espera que tengas esta profesión o este empleo o este negocio, pero no es algo que a ti te entusiasme, es algo que haces más para cumplir algunas expectativas o estándares de tu familia o incluso de otras personas. O si en mi casa todos quieren que tengan pareja, entonces voy a empezar a pedir por una persona que llegue a mi vida.

Entonces, ¿Qué ocurre cuando estás pidiendo por algo que realmente no te genera entusiasmo o que no te expande a ti, sino que lo haces por satisfacer a alguien más? No hay congruencia energética, porque en realidad ese pedido no es algo que tu realmente deseas. En ese pedido no está tu energía, sino que están las expectativas y proyecciones de los demás.

En otras ocasiones, nuestros pedidos no son algo así como WOW!, algo que realmente te entusiasma o que expanda tu mundo, sino que son más aquello con lo que te conformarías o aquello que desde tu mente, consideras que es posible. En este caso, muchos de tus pedidos están automáticamente limitados por nuestra mente y no tienen la energía real del entusiasmo de tu ser. Lo que muchas veces hacemos es que incluso al hacer los pedidos al universo los hacemos más desde la energía de la limitación que desde la energía de las posibilidades y de aquello que realmente expandirá tu realidad.